Comprar una vivienda es una de las decisiones más importantes en la vida de una persona. Y si hablamos de adquirir una vivienda nueva sobre plano, el proceso requiere una planificación más cuidadosa, ya que implica anticipar ciertos pagos antes de que la propiedad esté construida y entregada. En este contexto, el aval bancario se convierte en un elemento clave para proteger al comprador.
Pero ¿qué es exactamente un aval bancario? ¿Por qué es tan importante cuando compras una vivienda en construcción? ¿Qué obligaciones tiene el promotor? En este artículo te explicamos con claridad el papel del aval bancario al comprar una vivienda nueva sobre plano, y cómo puede ayudarte a tomar decisiones más seguras e informadas.
Comprar una vivienda sobre plano implica adquirir una propiedad que aún no ha sido construida o que está en fase de construcción. Es una práctica habitual en el mercado inmobiliario español, ya que permite a los compradores reservar una vivienda en una promoción nueva con condiciones atractivas y pagar de forma escalonada, lo cual te permite planificarte.
Forma de pago: será del 20% durante la fase de construcción de la promoción por medio de la reserva, contrato y recibos aplazados dejando el 80% a escritura pública. Con el contrato firmado, se solicitará el aval o póliza de afianzamiento de cantidades, que es el documento que garantiza todas las cantidades que entregarás durante el proceso de construcción, otorgando de esta manera la máxima seguridad al comprador, el aval incluye el 20% de la entrada.
Comprar una vivienda sobre plano, ofrece varias ventajas, como elegir la distribución, personalizar acabados, acceder a precios más bajos que una vivienda ya terminada, planificar la forma de pago y tener capacidad de ahorro durante el proceso de la construcción.
Y para tu tranquilidad financiera, el promotor está obligado a entregar el aval bancario que recoge los importes que abonas durante el proceso de construcción.
Un aval bancario es un instrumento de garantía financiera que emite una entidad bancaria a favor del comprador, en este caso, de una vivienda. Su función es asegurar que, en caso de que el promotor no entregue la vivienda en el plazo acordado o no cumpla con sus obligaciones, el comprador podrá recuperar las cantidades entregadas a cuenta.
El aval bancario:
Este aval debe estar vinculado a cada pago anticipado, y es un derecho legal del comprador según la legislación vigente en España.
Sí. Desde la entrada en vigor de la Ley 20/2015, de 14 de julio, que regula la garantía financiera en la compraventa de viviendas sobre plano, los promotores están obligados por ley a garantizar las cantidades que los compradores adelanten antes de la entrega de la vivienda.
En concreto, deben cumplir con dos requisitos fundamentales:
Si un promotor no ofrece este aval, está incumpliendo la ley y supone un riesgo elevado para el comprador.
Una vez firmes el contrato de compraventa con el promotor, éste, solicitará a la entidad financiera o compañía de seguros, el aval bancario que cubre el importe de la entrada, ese 20% que indicábamos antes.
Este aval debe contener:
Guarda el aval y en el momento de la entrega de llaves, lo entregas al vendedor para que pueda cancelarlo.
Si el promotor no cumple con los plazos acordados de forma injustificada o no finaliza la obra, puedes ejecutar el aval bancario. En ese caso:
Este procedimiento suele tener plazos establecidos y puede variar ligeramente según la entidad financiera, pero es una protección legal eficaz que garantiza tu inversión.
Aunque ambos instrumentos cumplen la misma función (garantizar la devolución del dinero en caso de incumplimiento), tienen pequeñas diferencias:
Ambas fórmulas son válidas y legales. Lo importante es que exista una garantía por escrito, específica y emitida por una entidad solvente.
Adquirir una vivienda sobre plano es una oportunidad, pero también un compromiso financiero a largo plazo. Contar con un aval bancario te ofrece seguridad, confianza y protección jurídica.
Aunque el aval bancario al comprar una vivienda sobre plano, es una gran herramienta de protección, no está de más tomar algunas precauciones adicionales antes de firmar nada:
Asegúrate de que el contrato de compraventa incluye la obligación del promotor de entregar avales por cada pago. Si no es así, pide que se incorpore por escrito.
Verifica que el banco o aseguradora que emite el aval esté autorizado y supervisado por el Banco de España o la Dirección General de Seguros.
Nunca aceptes garantías verbales. El aval debe ser escrito, firmado y con todos los datos claramente especificados.
Desde los justificantes de pago hasta el contrato, pasando por los avales. Todo podría ser útil en caso de reclamación.
Una vez que el promotor finaliza la obra, se firma la escritura pública de compraventa y se entregan las llaves, el aval bancario pierde su función.
A partir de ese momento, tu principal protección pasa a ser:
El aval bancario no es un detalle menor, sino una pieza clave para garantizar la seguridad de tu inversión inmobiliaria. Si estás pensando en comprar una vivienda sobre plano, exige siempre que el promotor cumpla con sus obligaciones legales y te proporcione un aval o seguro de caución por cada cantidad que anticipes.
Comprar sobre plano puede ser una gran decisión si cuentas con la información adecuada y las herramientas legales necesarias. El aval bancario es, sin duda, una de las más importantes.
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